Llegamos a finales de verano, con una temperatura espectacular, sobre los 20 grados de día y escasos 4-5 a la noche.
En Bariloche vive Noelia Ciaramella (hermana de Fer), con sus dos encantadoras niñas Morena y Bianca, a la que quiero agradecer su hospitalidad, un placer haberos conocido a ti y tus cariñosas niñas.
La semana fue de lo más relajado, visitando toda la región, nadando en las frías aguas de los lagos, y pasando el día con la familia Ciaramella, todo un privilegio. Semana muy especial, que también tuvo como hecho destacable un par de récords.
Por una parte Fernando se había propuesto realizar el Triple Cruce al Lago Nahuel Huapi, en sus algo más de 8Km de ancho en los puntos más cercanos desde la orilla que corresponde a la provincia de Neuquen, y la playa de San Carlos de Bariloche, en la provincia de Rio Negro, con un agua que puede estar más en calma que en una piscina vacía y al rato tan agitada con el peor de los mares, y a una temperatura que se mantuvo estable sobre los 12 grados durante toda la semana.
El jueves 5 de marzo fue el día escogido.
Salimos temprano, agua tranquila, y un primer cruce en 1h50' que hacía presagiar un gran tiempo en el triple, desde el bote Lorena y yo animábamos y alimentábamos a Fer, que brazada a brazada acortaba un sueño.
El segundo cruce fue más complicado, pudimos ver como entraba viento del sur, y el lago se comenzó a rizar hasta el punto de crear olas muy incómodas para el nado, sumado a las oscuras aguas debido a la gran profundidad del lago (que parece no tener fondo), y al frío del agua, comenzó a dificultar el cruce, pude acompañar y comprobar todo esto desde dentro del agua durante una hora, hasta que Fer logró completar el segundo cruce (del cual ya era poseedor del récord desde 2012).
El último cruce fue muy complicado y duro, sobretodo por la deriva de la corriente que hizo que Fer nadara de más, pero tras mucho sufrir logró alcanzar la playa de Bariloche en 7h13', estableciendo un nuevo e inédito récord, Enhorabuena Fer!!! Con un par!!
A mi me tocaba nadar la clásica Nahuel-Huapi organizada por la mítica Enriqueta Duarte el sábado 7 de Marzo, pero la climatología lo impidió. Finalmente el domingo fue el día, por suerte. 32 nadadores fuimos los afortunados para llevar a cabo el cruce, modo competición, pero con pocos barcos de guía o ayuda, y ninguna señalización. Me resultó muy curioso, un cordón, un globo atado al mismo a la cintura, un gorro de tela y a nadar. Supuestamente un barco de prefectura guiaría a los primeros, pero yo no vi barco alguno. Nos trasladaron al otro lado del lago, donde ultimamos los preparativos y donde se daría la salida. Lo cierto es que la semana había sido espectacular, y rematarla con una prueba de esta categoría en un lugar tan idílico era mejor de lo que podía esperar, a pesar de no haber entrenado casi nada desde los previos a Santa Fe, semana y media antes, y que mi alimentación esa semana era muy cuestionable.
Salí a disfrutarla, nadando cómodo, observando el espectacular entorno en el que me encontraba, casi al otro lado del mundo, a más de 12.000Km de mi casa. Me derivé un poco hacia la derecha, ya que la aparente corriente y oleaje venía desde ese lado, así evitaba corregir llegando a meta, pero creo que me excedí, ya que unas motos de agua, sobre la mitad de la prueba me advirtieron de lo derivado a la derecha que iba. Retomé punto de llegada y seguí nadando, sin ir fuerte, pero sin pausa, y pensando que con lo solo que iba si me pasaba algo no me encontraba ni el Nahuelito (monstruo del lago, mito o realidad?, yo no lo vi, una pena). Tras un rato que se me pasó muy rápido ya divisaba costa, y en seguida estaba saliendo del agua, parecía ser que era primero, pero justo detrás mio entraba otro nadador, al que no había visto en toda la prueba y que nado algo más orientado y acompañado, resultamos ser los primeros, y además con crono de récord para ambos, 1h34'45", (el anterior de la gran nadadora internacional Noelia Petti estaba en 1h37').
Llegada de la prueba:
Muy contento por lo que supuso, con muy gratos recuerdos de todos los nadadores y en especial de la maravillosa semana en Bariloche.
De Argentina me he traído muchos gratos recuerdos, grandes vivencias, y amigos, y solo una pequeña decepción que espero poder saldar el 2016, nadar la Santa Fe -Coronda. Mil Gracias Fernado, Lorena y Noelia, por vuestro trato, atención, hospitalidad, por mostrarme Argentina, por ser como sois, os espero en España.